Hace muchos, muchos años, había un
rey en el exilio, el pueblo le había quitado el trono a su padre.
Este rey, no aceptaba esa situación y movió con inteligencia sus
apoyos en el país del que era el legitimo rey. Esos movimientos
ayudaron para que hubiera un alzamiento militar en su país, el lo
apoyo con la seguridad que una vez triunfara este alzamiento
recuperaría el trono que era suyo por derecho. El golpe de estado
que degenero en una guerra triunfo, pero los malditos militares no le
dieron el trono, al contrario, entonces decidió cambiar su
estrategia, paso a apoyar a los que quitaron el trono a su padre, con
la esperanza de que todos juntos quizás derrocasen a los militares.
Mientras tanto su familia crecía,
tenía dos hijos maravillosos, uno de ellos parecía tener el mal
real, la hemofilia, pero el otro era despierto e inteligente. En unas
vacaciones los dos chiquillos se fueron de caza, solos y juntos como
hermanos. Pero los dioses no eran generosos con el exiliado rey,
salieron de caza dos hijos y solo regreso uno. ¿que paso en el
monte? Nunca se sabrá, pero una esta clara, la realeza no asesina,
tiene accidentes. Así que mejor mirar a otro lado y pensar en otra
cosa, ya que si pensaba en los muchos egoístas motivos que podía
tener el hijo que sobrevivió para matar a su hermano se volvería
loco. No sabemos si por las sospechas o por estrategia, el exiliado
rey decidió mandar a su torpe y hemofílico hijo a ser educado con
el dictador militar, para intentar limar asperezas con los militares.
Por fin el dictador militar murió, una
nueva esperanza nacía en el, las gentes en su país quería que
regresara la monarquía, todos querían. Querían una monarquía
parlamentaria, por fin iba a ser rey, después de tantos años el
viejo cumpliría su sueño. Con lo que no contaba el pobre viejo es
con su abyecto hijo, que aprovechando su cercanía con el dictador
había conseguido usurparle el trono a su padre. Que triste se puso
el viejo cuando se entero, que amargura le entro, primero le mata a
un hijo y después le usurpa el trono. Maldito Cain, pensó el
anciano.
¿Que os parece este culebrón? ¿A que
este argumento es digno de Corín Tellado? Pues poned al viejo el
nombre de Juan y a Cain el de Juan Carlos. ¿A que el rey ya no
parece tan buena persona? Esta claro que todo depende de los puntos
de vista.
A mi eso de que el pueblo quería una monarquía... me parece un cuento. :D
ResponderEliminarjajaja, tienes razón, pero eso es lo que nos venden. El pueblo lo que quería es que se acabara la dictadura.
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