Uno muchas veces no se puede creer lo que lee, lee una
noticia y se piensa que está sacada de alguna publicación de humor tipo “el
mundo today”. Después la contrasta y ve que no, que de humor nada, que es
cierto lo que lee.
Hoy me ha pasado eso cuando he leído lo de la imputación a
Mas y a sus dos compañeras de gobierno. No me lo podía creer.
A ver, Mas ha perdido el plebiscito aunque haya ganado las
elecciones, por lo tanto se imposibilita el argumento del mandato popular. Con
ese argumento, el de la derrota en el plebiscito, si se juega bien, se puede sacar petróleo. Pero el gobierno no
quiere jugar bien, prefiere demostrar que no hay separación de poderes,
prefiere judicializar un problema político, prefiere ser visto como un jugador
sucio.
Y todo eso el gobierno lo hace el día del aniversario del
fusilamiento de Lluís Companys. Los del gobierno o no tienen ni puta idea de la
historia de España o tienen muy mala idea y buscan encender otra vez el
incendio que las elecciones catalanas habían dejado casi controlado.
Los de la CUP hoy han estado muy atinados en sus intervenciones. Tiene mucho más respeto al estado español la CUP que el PP.
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