sábado, 8 de octubre de 2016

Sobre el vídeo de los jugadores del Éibar y sobre los viernes de dolores.

Hay veces que soy más fino en los comentarios que hago a diferentes artículos que leo, que en las cosas que escribo en este blog, ayer me pasó en dos ocasiones.

Una fue en Facebook, en respuesta a un artículo sobre el video de los jugadores del Éibar. En los comentarios pasaba lo de siempre, algunos se dedicaban a culpar a la chica de lo sucedido. Decían cosas como ¿Por qué se fue con ellos? ¿Por qué no les rompió el teléfono cuando vio que estaba siendo grabada? ¿Por qué no les retorció los huevos? Por qué, por qué, por qué. Mirad, ya sabéis que intento siempre tener empatía, ponerme en el lugar de las personas (aunque no siempre lo consigo). En este caso al ponerme en el lugar de los diferentes implicados os digo que es posible que hubiera actuado como la chica, pero que en ningún caso hubiera actuado como los chicos y no lo digo por el trio (de hecho un trio es una de mis fantasías aun no realizada), lo digo por grabar y difundir las imágenes y porque claramente ella dijo: no eso no, para. Bueno, os dejo el comentario que me enrollo:

“Decís que porque no lo impidió, por qué no les retorció los huevos, por qué no.... Os pregunto ¿Qué hubierais hecho vosotros en esa situación? ¿Hubierais llegado a esa situación de estar en su lugar? Yo no lo sé, no sé si me hubiera ido a la cama con dos chicos famosos y a los que admiro, igual sí. Una vez ya en la cama.... Pues igual es entonces cuando te das cuenta de que la has cagado, que esos chicos no son admirables, que son un par de hijos de puta. Ya en esa tesitura, lo que te queda es no hacer nada que les enfade e intentar salir de ahí cuanto antes. Así que retorcer huevos no, violencias menos (no sea que se pongan violentos contigo), y quejarte... Pues como lo hizo. ¿O qué se puede hacer si ya estás en esa situación?
Lo que quiero decir es que no podemos juzgar lo que hizo la chica, no estábamos allí y por lo tanto no valoramos la situación con todos los elementos de juicio. Lo que está claro es que los dos angelitos son unos cabronazos por grabar y por difundir.”

El otro comentario que os quiero poner le puse en el blog de Juan Antonio Cortés Avellano, blog  que recomiendo vivamente, sobre todo por su visión sobre la guerra civil y por su visión de la actualidad (visión en la que no siempre coincidimos). Este va sin explicación previa, pero si posterior: “Y eso pasa porque sinceramente prefiero un gobierno en funciones, en funciones no hay viernes de dolores, no hay bajada de pensiones, no hay nuevos recortes. Cuando se forme gobierno (sea del color que sea y sea ahora o después de unas terceras elecciones), Cuando se forme gobierno... Nos vamos a cagar.”

No sé si recordáis ese periodo del gobierno de Rajoy en el que cada viernes, en la conferencia de prensa posterior al consejo de ministros, nos daban un disgusto. Un viernes nos decían que quitaban los días libres a los funcionarios, al siguiente decían que subían el IVA, al siguiente lo de las tasas judiciales, al siguiente nos quitaban una paga extra, al siguiente endurecían los requisitos para obtener becas, al siguiente bajaban las prestaciones de desempleo, al siguiente subían el IRPF. Así se pasaron casi dos años, viernes tras viernes de disgustos. El calificativo de viernes de dolores es por eso, no sé a quién se le ocurrió, pero fue una ocurrencia muy atinada.
En cuanto haya gobierno, el que sea, los viernes de dolores se reeditarán y regresarán con fuerza. Incluso creo que nos vendrían bien unas terceras elecciones, eso supondría unos meses más sin viernes de dolores.

Con esta entrada me considero reseteado, que había entrado en bucle. Os dejo un enlace al blog de Juan Antonio: http://badajozylaguerraincivil.blogspot.com.es/



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