Hoy me ha pasado algo curioso, algo que
no me había pasado nunca con un texto tan corto, no he podido
terminar de leer una entrevista que publica el país al ministro De
Guindos.
La entrevista en si es una burla,
tergiversa los datos y transforma lo negativo en positivo. Para el
todo esta muy bien, estamos llenos de florecillas invernales, la
bolsa va de cojones según este señor y que decir de la prima de
riesgo, según el es inmejorable. Según el ministro el que los
trabajadores cobren cada día que pasa menos dinero es bueno, que el
consumo se desplome es bueno, que el paro no vaya bien es bueno. Ya
que todo esto mejora la competitividad. Vamos, el mundo al revés.
Hoy nos hemos acostumbrado a ver las
cosas al revés y que nos parezcan normales, incluso ves que muchos
defienden este mundo al revés. Que defienda estas barbaridades el
señor Rosell, presidente de los patronos, es normal. Pero que las
defiendan algunos de mis compañeros de trabajo no es normal, bueno
normal es, no debería ser normal.
Yo creo que todos nos estamos
insensibilizando, normalizando los comportamientos malos. Estos días
estamos leyendo que los sobresueldos en el PP eran normales, que
todos lo sabían. Hoy mismo he leído que Aguirre utilizó los actos
de homenaje a Miguel Ángel Blanco para conseguir dinero de la
Gurtel. Vemos que para ellos es normal utilizar cualquier cosa para
conseguir dinero, incluso la memoria de los muertos, lo que es peor
es que nosotros ya vemos normal que hagan cualquier bajeza para
conseguir dinero. Ayer mismo se publicaron los mensajes que se
intercambiaron barcenas y rajoy (con minúsculas). Resulta que el
presidente mintió como un bellaco y yo lo veo normal. ¿Que se puede
esperar de una persona con su catadura moral? Una persona que cobró
por ceder su puesto de registrador estando prohibido, que cambió
siendo ministro normas para lucrarse, que cobró sobresueldos
ilegalmente siendo ministro.
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