jueves, 23 de octubre de 2014

La EPA y Alaya.

Ha salido la EPA del tercer trimestre y es cojonuda, al menos eso dice Rajoy. La verdad es que el maquillaje de cifras que hace el gobierno da resultado.

Si nos vamos al ámbito local vemos que los datos no son tan buenos, como gobierna la oposición no hacen tanta ingeniería contable. Estos del PP son la pera, aun piensan que pueden engañar a alguien.

Sevilla es hoy una ciudad volcada en el turismo, no nos quedan más cojones, el pobre tejido industrial que teníamos ha sido desmontado ERE tras ERE. Se da la circunstancia de que en este verano se han batido todos los records de visitantes, jamás había venido tanta gente a Sevilla y jamás se habían gastado tanto.

Por lo tanto, creo que esa tesis del gobierno no funciona. Sí, esa que dice que si los patronos ganan dinero generarán puestos de trabajo. Los patronos ganan dinero a espuertas y el paro sube.

Otra manera de generar puestos de trabajo es la inversión pública, pero aquí esa inversión se la quedan los patronos, en subvenciones o en pago por trabajos que no realizan. Al respecto de los trabajos que no realizan, andan ya los patronos revueltos con la jueza Alaya, dicen ahora que la mueve el odio al PSOE, que tiene tantas ganas de condenarlos que mete la pata. Hoy han llegado a decir en “la SER” que la jueza tiene ansias de protagonismo (¿no os silva al oído esa expresión?) y que no tiene razón al instruir el asunto de los cursos como un único asunto.

Decía el vocero de la patronal en la radio, que no es lo mismo un curso para pescadores de Bárbate, que un curso para olivareros de Jaén. Por eso lo lógico sería que lo juzgaran jueces diferentes. Claaaro, mejor que lo juzguen jueces a los que se pueda comprar. ¿Verdad vocero?


Si en la mayoría de los cursos analizados se robaba, alguna conexión común habrá, vamos digo yo. De todas formas, eso de separar la causa, ya lo han intentado con éxito con el caso Gurtel, tiene más piezas separadas que pelos tengo yo en la cabeza. Logrando con ello la prescripción de muchos de los delitos.

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